Una excursión desde La Ciotat
Ruta de aventura por las calanques
Son las 9.20 h cuando nuestro monitor, Guillaume, nos recibe en el punto de encuentro. Estamos en La Ciotat, a la entrada del Parque Nacional de las Calanques. La dirección es de fácil acceso, así que aparcamos un poco más adelante y caminamos unos minutos para llegar al punto de partida de la actividad. Guillaume nos presentó entonces el recorrido que íbamos a realizar: una excursión de unas 3 horas, durante la cual haríamos una serie de rápeles, tirolinas y vías cordadas en los acantilados: el programa era tentador, y no requería ningún conocimiento particular de escalada. Nos equipamos todos con arneses y cascos, ¡como aventureros! Una vez equipado todo el grupo (una familia de 4 miembros y 3 parejas), pudimos iniciar la actividad y emprender nuestro primer sendero, en plena naturaleza…
Una ruta intermedia entre el senderismo clásico y la escalada
El sol ya está alto, pero el calor es agradable. Serpenteamos por la garriga para acercarnos al calanque y alcanzar la primera etapa de la ruta. Llegamos a la cima de una gran masa rocosa, donde el monitor coloca una cuerda. Será nuestro primer rápel. Después de algunos consejos para colocarnos y acostumbrarnos al descenso, todos nos miramos para ver quién iba a ser el primero: ¡no iba a ser yo! Un chico un poco más valiente decidió dar el paso. Se colocó de cara al acantilado y, con las dos manos en la cuerda, empezó a descender por la pared. Nos turnamos para hacer rappel varias veces y terminamos en el fondo de una falla un poco más abajo. Al final, no es tan complicado: ¡lo más difícil es empezar!