Ruelle végétalisée dans le quartier Noailles
Biodiversidad en la ciudad

Senderismo en Marsella

Marsella se percibe a menudo como una ciudad de historia y cultura. Pero éstas no son sus únicas riquezas… En el corazón de la ciudad, pero un poco escondida de las principales calles concurridas, descubra una Marsella más secreta, donde encontrará encantadoras y frondosas callejuelas. ¡Siga nuestra visita guiada!

Publicado el 26 diciembre 2024
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Jade Orengo
  • Marsella en 3 palabras

    Maravillosa, diversa, autóctona.

  • Mi barrio favorito

    Les Goudes, y su apacible entorno (fuera de temporada) para tomar una copa y disfrutar de un aperitivo mientras se pone el sol.

Naturaleza en el corazón de Marsella

Un barrio verde: el barrio de Noailles

Quedamos a las 10 de la mañana en la parada de tranvía de Roma-Davso, en el barrio de Noailles, una zona en la que nunca había estado. Cuando llegué, la guía ya estaba allí y me dio una calurosa bienvenida. Una vez que todo el mundo hubo llegado, se preocupó de situarnos en un mapa y nos explicó la historia del barrio y el lugar que ocupa la naturaleza en la Cité Phocéenne.

Mientras paseábamos por las callejuelas y las bonitas fachadas, nos dimos cuenta de que la naturaleza está en el corazón de la historia de Marsella. Pero no siempre fue así. La calle del Arco, por ejemplo, se ha embellecido con multitud de plantas gracias a una iniciativa ciudadana destinada a combatir su mala fama. ¿Qué mejor que la naturaleza para fomentar la tranquilidad?

Plantas mezcladas con artecallejero

Como amante del arte callejero y de la fotografía, ¡no me ha decepcionado! Las plantas se mezclan con los bonitos colores de los murales de muchas calles. En fachadas, persianas e incluso bolardos de aparcamiento, todo se vuelve más colorido y alegre.

¿Lo sabías?

Elhotel Ryad, con sus palmeras, jazmines y rosales, es un remanso de paz donde se puede disfrutar de una taza de té a cualquier hora del día. El guía estará encantado de enseñárselo si el hotel está abierto.

Perfecta armonía con la ciudad

No hace falta mucho…

… ¡para hacer mucho! Mientras paseo por la ciudad, me doy cuenta de que no hace falta mucho para cambiar las cosas. Neumáticos y viejos cajones de verduras vuelven a la vida, dando vida a muchas plantas que parecen prosperar allí. No sabría decirles el nombre exacto de cada una (no me acuerdo y el guía lo hará mucho mejor que yo, ¡por eso les invito a hacer la visita!), pero me sorprendió su diversidad y el tamaño de algunas de ellas. Esto demuestra que, a veces, unos simples gestos y unas manitas verdes pueden revivir todo un barrio.

Naturaleza en cada esquina

Y eso es mucho decir. Basta con levantar la vista para ver cosas invisibles a primera vista. En la esquina de una calle, una planta hace su nido en el hueco de un muro y emerge como por arte de magia, exponiendo sus diminutas hojas al sol marsellés. Esta visita insólita a Marsella me dio una perspectiva diferente de la ciudad tal y como la vemos. La biodiversidad está por todas partes, forma parte integrante del paisaje urbano y de la vida marsellesa. Esta visita fue una auténtica sorpresa, y me di cuenta de que Marsella esconde muchos secretos que nunca habíamos imaginado.

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